UN CLÁSICO SIEMPRE ES ESPECIAL

Llega la semana del gran clásico por excelencia del fútbol español y aunque no sea el único partido digno de mención esta jornada, resulta necesario hacer una reflexión especial en este espacio; una correcta situación de los dos conjuntos con el análisis de ambas perspectivas son indispensables para la preparación de un partido que sigue parando a medio mundo.

El ‘derbi’ llega en el mejor momento posible para el F.C. Barcelona puesto que aventajan a su máximo rival en nueve puntos y son líderes de la “Liga BBVA”. Los de Guardiola se acercan cada jornada más y más a la perfección, dando la imagen de un equipo que este año se ha planteado acallar muchas críticas con ilusiones renovadas. Por si fuera poco parecen recuperar al mejor Henry que ante el Valencia hizo un ‘hat-trick’ en tres jugadas como ‘nueve puro’ por el centro, algo que lleva mucho tiempo echando de menos, y en un partido en el que Messi pasó bastante desapercibido. Además del galo y el argentino, estarán Eto’o, Xavi, y un largo etcétera que hacen de este Barça un equipo terrible, nada que no sepamos a día de hoy.

En el otro bando las aguas corren más que revueltas; aún perdura la resaca de la asamblea de socios compromisarios con la pésima imagen dada por la institución y resuelta con un aprobado ‘raspado’ para Ramón Calderón, que aguanta estoicamente esta vorágine de absoluta inestabilidad deportiva gracias a sus correctas cuentas, algo relativamente fácil si se gasta “poquito” en grandes fichajes. Por otro lado, y hablando de fútbol, la cosa no pinta mucho mejor; el equipo lo intenta pero realmente no da mucho más de sí aunque contra el Sevilla, aun siendo inferiores, fueron capaces de remontar un 1-3 y terminar perdiendo. La plaga de lesiones, la racha del rival, los fallos en defensa, Van Nistelrooy, etc., son demasiados handicaps para los hombres de Schuster en su visita a la Ciudad Condal.

Mal se presentan las cosas el sábado para los blancos pero ya se sabe que en este tipo de choques puede pasar de todo. Aunque todo el mundo prevea una ‘vendetta’ por el pasillo de la temporada y una histórica goleada, no se nos debe olvidar que hace dos años y en una situación similar, el Madrid sacó un empate del Nou Camp que bien pudo ser goleada y cogió tal moral que terminó alzándose con el título liguero. En definitiva, esta es una semana que se vive de una manera diferente, y no porque se acerque la Navidad, sino porque, estén como estén los dos equipos, un Barça-Madrid siempre es especial.